Eugenia

En el tercer piso de los consultorios externos del sanatorio británico se encuentra el área de ginecología y obstetricia. De lado izquierdo ginecología y del lado derecho obstetricia. Bah lo asumo así porque en una parte veo embarazadas y bebés y en la otra no.
Creo que este lugar del mundo es un lugar hermoso porque somos todas mujeres. Exceptuando raras veces cuando se abre la puerta y una figura y voz masculina es la que llama por apellido a la próxima paciente o cuando vienen a acompañar a su pareja y por acompañar me refiero a mirar televisión mientras ella espera nerviosa por entrar.
Se vive cierta tensión como en toda institución del área de salud, pero percibo algo más en el aire y es lo que lo hace especial. Hay complicidad. Creo que nos hablamos con los ojos. Yo
le digo a todas con la mirada que todo va a estar bien.
Me pone bastante nerviosa ir y aunque no debería no hay vez que no lo posponga lo más que pueda pero en la espera los cuadros de Klimt que hay en las paredes me tranquilizan un poco.
Siempre ingreso al consultorio 4 que es dónde atiende Eugenia
a veces salgo llorando
a veces riéndome
nunca con los cordones atados porque no quiero hacerle perder tiempo a Eugenia que cada vez que me despide me dice cuídate.