Sebastián tiene 32 años y para lo único que me quiere es para coger. Eso me hace sentir normal, me hace sentir que mi cuerpo vale. Cuando chapamos no siento nada y eso me encanta. Sebastián nunca me pasó a buscar y eso no me molesta. Sebastián habla todo el tiempo y eso es genial porque así no tengo que contar mi vida. Sebastián hizo todo lo posible para que no lo extrañe. Sebastián me deja ser otra, o una yo que no soy nunca. A Sebastian lo quiero porque no lo amo.
Sebastián me regaló un llavero de Toy Story. Sebastián me hizo probar el pan bimbo artesano. Sebastián me hizo esperarlo en la puerta de Antares. Sebastián hizo que me bañe tres días seguidos y eso es más que lo que logró toda la humanidad. Sebastián tiene una casa, una moto, una bicicleta, tres computadoras y creo prognatismo mandibular. Sebastián es rubio y de ojos celestes. Sebastián es la persona más feliz que conozco. Sebastián no me habla sólo para preguntarme cómo estoy pero cuando duermo con él me abraza todo el tiempo. Sebastián no sabe las cosas por las que pasé. Sebastián no sabe las cosas por las que no pasé. Sebastián no sabe que soy especial. Sebastián no sabe que él es especial por interesarse en mí. Sebastián no se dio cuenta lo importante que es para mí haberlo conocido. Sebastián me hizo llorar una vez, pero de felicidad.
